Amazon apuesta por la convergencia entre el e-commerce y el comercio tradicional abriendo su primera tienda física. El objetivo de este establecimiento es que los clientes puedan comprar de forma inmediata los productos que deseen sin tener que soportar las incomodidades que conlleva un proceso de adquisición de bienes. Únicamente tendrán que descargarse la aplicación Amazon Go para registrar sus compras y realizar los cobros de forma automática.

Por el momento, se ha abierto un centro piloto disponible para los empleados, pero se espera que en el próximo año, se pueda realizar la apertura para el público en general.