Teniendo en cuenta el negocio que suscita el turismo y la demanda de alquileres vacacionales (sólo en España más de 8 millones de personas optaron por este tipo de alojamientos entre 2014 y 2016), Google ha decidido incluir los alquileres vacacionales en sus búsquedas, de momento dentro de Hotel Ads.

No obstante, seguirá con la misma filosofía que con los hoteles: el buscador no cobra por las reservas que se realicen sino que los ingresos proceden de los propietarios, que pagarán por los “clics” en su propiedad que Google les derive.

Este servicio irá dirigido no sólo a particulares, sino también a plataformas como Airbnb o Homeaway, convirtiéndose en un cooperador y no en un competidor de las mismas.

Para más información consultar el siguiente enlace: Google prueba suerte con los alquileres vacacionales