La manera en la que percibimos un producto no se basa únicamente en las características útiles del mismo. Gracias a lo que percibimos a través de los sentidos creamos unos juicios que pueden llegar a hacernos sentir un sabor diferente.

Esto es muy común en el sector de productos de alimentación y bebidas. Una lata de Coca-Cola de color rojo es percibida como más dulce para los consumidores; las galletas se perciben más crujientes cuando se presentan en un paquete con relieve; y en el caso de los niños, se perciben mejor los productos cuando llevan personajes animados estampados y muchos colores.

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El buen packaging hace que las cosas sepan mejor